La situación en el Estadio Nacional se volvió tensa cuando los jugadores se acercaron a las gradas. Después del empate 1-1 por la sexta fecha de las eliminatorias del Mundial 2026,
Efectivos de la Policía Nacional de Perú impidieron que los jugadores de la Vinotinto tuvieran un acercamiento con sus fanáticos presentes en el Estadio Nacional de Lima
Los agentes del orden no dejaron a los futbolistas acercarse. Hubo empujones y reclamos por ambas partes. Mientras algunos intentaban calmar la situación, otros fueron víctimas incluso de actos agresivos como Nahuel Ferraresi. El jugador casi se cae al suelo por el empujón que recibió luego de intentar dialogar con los agentes.
Los usuarios en la plataforma catalogaron el hecho como un nuevo ataque xenófobo contra los venezolanos en Perú. Antes de iniciar el juego se informó que en todos los accesos del estadio estarían presentes agentes de la policía judicial para asegurarse de que todos los fanáticos venezolanos que entraran tuvieran su ticket y su documentación en regla. El control migratorio se implementó, en palabras de la policía, para mantener el orden y evitar manifestaciones.